La propuesta es dibujar sobre la fachada de uno de los tantos edificios abandonados. Realizar un grafitti virtual sobre lo que sucede en las historias de este contexto, de este barrio y esta población específica.
Paralelo a esto, se propone en conjunto con CRAC, realizar una comida con las personas del lugar o las personas que quieran intervenir en su lugar, dejando la huella virtual en el espacio y en ellos mismos, huella que no se queda en la fachada del edificio pero que se traspasa como una pregunta por el espacio.
